CGE desarrolla acciones especiales para mitigar riesgos durante el periodo estival

Cuando restan menos de tres meses para que se inicie una nueva temporada estival, CGE -empresa de distribución eléctrica que atiende a más de 3,2 millones de clientes entre las regiones de Arica y Parinacota y La Araucanía- ya puso el foco en ese periodo. Esto, pues el verano tiene ciertas condiciones de riesgo que pueden alterar la continuidad del suministro.

Si a ello le sumamos que durante el invierno hubo pocas precipitaciones en gran parte de la región y ya se ha anunciado que entre los meses de diciembre, enero y febrero habrá altas temperaturas, hay razones fundadas para estar preparados.

Con ese objetivo, durante la segunda parte del año, CGE puso en marcha un régimen de acciones para gestionar sus redes denominado Plan Verano 2023 – 2024, el que se extiende por gran parte de su zona de concesión y donde la Región de Coquimbo es la única del norte de Chile donde se aplicó.

Esta iniciativa se basa en tres puntos: mantenimiento y operación de las redes; atención de emergencia en contingencia; y coordinación con autoridades y comunidades. A través de éstas se desarrollan ámbitos que minimizan las condiciones de riesgos, especialmente en aquellas zonas con extensas áreas verdes.

Una de las primeras labores que realizó la compañía tuvo que ver con hacer una inspección pedestre en 60 kilómetros de línea, la que permitió obtener hallazgos que fueron gestionados de forma inmediata. Uno de esos tiene que ver con el despeje de vegetación arbórea cercana a la infraestructura eléctrica. “En el marco de ese plan, podamos 9 kilómetros, lo que da cuenta de una preocupación por evitar que ramas o árboles alteren el suministro que le entregamos a nuestros clientes”, expresó Oscar Jerez, gerente zonal de CGE.

La realización de esas faenas no implica que sean las únicas, pues se sigue permanentemente monitoreando las redes y actuando de forma inmediata y proactiva en caso de encontrar algún indicio que pueda afectar el servicio.

Asimismo, se hizo una revisión de casi 200 equipos que sirven para mantener operativas las redes. Es así como se hicieron pruebas en equipos que se manejan a distancia (telecomandados) y aquellos que son de activación manual.

Otro de los aspectos que consideró este plan tuvo que ver habilitar equipos de respaldo para cuando ocurran interrupciones prolongadas de suministro. Las brigadas visaron el funcionamiento de 25 generadores de distinta capacidad y que totalizan una potencia de más de 11 Mw. Además, se cuenta con dispositivos móviles para llevar hasta cualquier parte de la región.